MÓVIL OTOÑAL

La tarde del domingo era para coger castañas. Alicia junto con su abuelo, bien abrigados, salieron después de comer con sus cestas y guantes preparados, se estremecían solo con pensar en el olor a castañas asadas en la tarde noche, se recogieron al atardecer cuando el sol con un brillo especial se escondía tras las montañas…

Cotylorhiza Tuberculada, que así se llama la medusa huevo frito, aparece todos los otoños. La muy presumida con sus ocho brazos cubiertos de tentáculos, lleva botones de vistosos colores azules, blancos y violetas que utiliza para llamar la atención. Aun con este atuendo, se ha dedicado a recoger palos y piñas para decorar su casa con un móvil otoñal de lo más bonito que hemos visto en mucho tiempo.

UN JARDÍN EN MI VENTANA

 Las obras para adecentar el jardín iban lentas debido a la escasa mano de obra. En cuanto finalizaron la abuela de Alicia puso a punto sus macetas que pronto florecieron. - Gracias abuela, por enseñarme un poquito de jardinería - dijo Alicia.

La lluvia de primavera en la costa, mantenía a las medusas lejos de la playa, el agua de diferente densidad y salinidad forma una barrera física, así que estuvieron entretenidas con las flores y el canto de los pájaros.

APRENDIENDO A AMAR

 Le dijo que la quería muchísimo y con un beso en la mejilla la dejó dormir. Alicia estaba cansada de corretear toda la tarde de un lado a otro, estaba entusiasmada con tantos regalos, con las flores y los bombones... Había sido una gran fiesta el aniversario de boda de los abuelos, tantos años de respeto y amor se merecían un ceremonia así.

No tardaron mucho en decidir que hacer antes de que se acabase el invierno, la primavera estaba a la vuelta de la esquina y el mar más caliente de lo normal, así que la medusa Doña Pelagia Noctiluca y toda su familia, encontraron  la respuesta a la pregunta ¿Qué es el amor?

TIEMPO DE MASCARILLAS

     Después de un montón de meses, por fin Alicia podía volver a salir. Su abuela que había vivido otra pandemia, no dejaba de darle consejos por su bien. Alicia estaba cansada de tanto consejo, solo pensaba en lo divertido que sería volver a ver a sus amigos, jugar, cantar, charlar... ¡Cuántos planes!

    Se había impuesto en todo el territorio el uso obligatoria de mascarillas o tapabocas como lo llaman las medusas de los mares del sur, y cómo no, estas se pusieron manos a la obra. Los cartones de los embalajes del hidrogel les brindaron la oportunidad de construir estas maravillosas máscaras Picassianas!!!